Si me pusiera a contar las bendiciones vividas este año 2014, tendría una o más para cada día. Recordar lo vivido es como mirar fotos, las imágenes han quedado fijas y nos sirven de recuerdo.
Este fue un año de adiciones, pero también de pérdidas: despedir a amigas que partieron, algunas angustias vividas, metas sin alcanzar.
Hoy vuelvo a cero, dejando lo pasado en el pasado, y extendiéndome hacia lo que tengo por delante. Me concentro en lo que me falta por recorrer. Y vuelvo a decir, como hace 30 años: Señor, me tomo de ti, sé que estarás conmigo siempre.
Pat MV