Cómo encontrar fortaleza en tiempos difíciles

Querida amiga,

Hoy te escribo a ti, que estás atravesando una prueba muy difícil en tu vida, una que parece no tener fin.

Nunca pensaste que algo así te podía ocurrir. Sin embargo ahí está, ha llegado sin avisar y no tiene planes de dejarte. Sé cómo te sientes, soportar el dolor y la angustia durante mucho tiempo nos hace sentir cansadas y desanimadas. Sé cómo te sientes porque he estado ahí.

Descubramos juntas cómo encontrar fortaleza en tiempos difíciles.

Hay esperanza y un futuro lleno de bendición para ti. Tal vez te parecerá un poco sin sentido en estos momentos, pero no lo voy a dejar de decir: Dios renueva tus fuerzas, reaviva tu esperanza  y tiene un futuro lleno de bendiciones para ti. Esto que te ocurre ahora, también pasará.

La Biblia dice en Jeremías 29:11 «Porque yo sé los planes que tengo para ti —declara el SEÑOR—, planes de bienestar y no de mal, a fin de darte un futuro y una esperanza.» Dios siempre tiene un plan para nosotros y ese plan incluye un futuro lleno de bendición.

Además, en Romanos 8:28 dice «Y sabemos que Dios hace que todas las cosas cooperan para bien de aquellos que lo aman, que han sido llamados conforme a su propósito.» Aun cuando las cosas parezcan difíciles y no tengamos una respuesta inmediata, Dios está trabajando en nuestra vida para llevar a cabo su propósito y traernos bienestar.

Otro versículo que puede ser una gran fuente de esperanza es Filipenses 4:13, que dice «Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.» Esto significa que no importa cuán difícil sea la situación que estás enfrentando, tienes la fuerza y el poder de superarla en Cristo.

Recuerda que no estás sola en esta lucha. En Juan 14:18, Jesús dice «No os dejaré huérfanos; volveré a vosotros«. Él siempre está contigo y te brinda su consuelo y apoyo en los momentos más difíciles.

Querida amiga, no pierdas la esperanza. Dios tiene un plan maravilloso para ti, y aunque las pruebas puedan ser difíciles, Él está trabajando en tu vida para traerte bendición.

Recuerda:  Tienes la fuerza y el poder de superar cualquier obstáculo en Cristo. Y atesora esta verdad: no estás sola.